La pandemia del COVID-19 ha supuesto un duro golpe para la economía española y, al igual que en las restantes crisis, las pequeñas y medianas empresas son las que más han sufrido y sufren las consecuencias de la misma. No obstante, los juzgados y tribunales han abierto una línea para mitigar todos esos daños y es reclamar a su aseguradora.

La práctica totalidad de las pymes tienen seguros en sus negocios y la mayoría de ellos cubren las pérdidas consecuenciales o lucro cesante, es decir, las pérdidas que supone para el negocio tener que parar su actividad. A nadie se le escapa que durante el confinamiento y los cierres autonómicos muchos negocios han cerrado, por lo que se ha dado el hecho por el que las aseguradoras tendrían que indemnizar.

Evidentemente, las compañías de seguros se escudan en sus interminables condiciones generales para denegar las solicitudes de cobertura, pero los juzgados y tribunales empiezan a concederlas, entendiendo que los límites tan generales y absolutos están pensados para denegar prácticamente siempre la cobertura en una póliza, anulando dichos límites.

Por ello, si tu negocio se ha visto afectado por estos cierres y tienes un seguro contratado, contacta con Sirvent y Granados Abogados. Estudiaremos tu póliza sin coste alguno y te informaremos si es viable o no proceder a reclamar para cobrar la indemnización que pudiera corresponderle.